Este sábado, usuarios y empresas de múltiples sectores esenciales, incluidos el bancario, aeronáutico, medios de comunicación y salud, comienzan a recuperarse del «mayor apagón informático» registrado hasta la fecha, originado por un fallo en el sistema operativo Microsoft Windows.
La interrupción fue ocasionada por un error en una actualización de software de CrowdStrike, una empresa de ciberseguridad con sede en Austin, Texas. La actualización defectuosa afectó a Windows 10, causando que los equipos se quedaran atrapados en la «pantalla azul de la muerte», según explicó George Kurtz, director general de CrowdStrike, en un comunicado en la plataforma X.
Troy Hunt, experto en ciberseguridad y responsable del portal HaveIBeenPwned, confirmó que la caída representó «el mayor apagón informático de la historia».
LLAMADO A LA CALMA: NO FUE UN CIBERATAQUE
Kurtz subrayó que lo ocurrido no fue un incidente de seguridad ni un ciberataque, sino un problema técnico aislado para el que se ha proporcionado soporte a los clientes, permitiéndoles obtener las actualizaciones necesarias. Expertos informáticos explicaron a EFE que la última actualización de controladores de Falcon contenía errores que causaron la caída de Azure, la plataforma de computación en la nube de Microsoft. Esto provocó la aparición de los temidos «pantallazos azules», dejando los sistemas inoperativos y requiriendo el reinicio de los servidores.
Kurtz ofreció disculpas por las interrupciones y aseguró que los ingenieros de CrowdStrike ya resolvieron el problema. Sin embargo, advirtió que podría tomar tiempo para que algunos clientes vuelvan a operar con normalidad.
TRANSPORTE AÉREO, EL SECTOR MÁS AFECTADO
El fallo en Microsoft causó problemas significativos en el registro de pasajeros y sistemas de información de aerolíneas a nivel mundial, resultando en la cancelación y retraso masivo de vuelos. Aerolíneas como American Airlines, Delta y United cancelaron o retrasaron vuelos globalmente, generando largas filas en los aeropuertos.
En Estados Unidos, más de 31,000 vuelos fueron retrasados y alrededor de 3,600 cancelados. En Europa, aeropuertos como Heathrow en Londres y otros en el Reino Unido, así como en Roma, Schiphol, Berlín, Zurich y Cracovia, se vieron afectados. En Latinoamérica, países como Argentina, Panamá, República Dominicana, Perú, Honduras y Chile experimentaron mínimas afectaciones. En Asia y Oceanía, aeropuertos en Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Baréin, Hong Kong, Sídney y Melbourne también reportaron problemas, aunque mayormente limitados.
INCIDENCIAS GLOBALES
El apagón no solo impactó a las aerolíneas, sino también a bancos, hospitales y diversas instituciones. Incluso el sistema informático de París 2024 sufrió interrupciones, afectando la entrega de uniformes y acreditaciones.
En Australia, el sistema de pago de supermercados como Woolworths y bancos como NAB, ANZ, Commonwealth Bank y Bendigo Bank se vieron comprometidos. En Japón, la falla afectó una web del sistema ferroviario y las cajas registradoras de varios negocios.
Empresas alemanas, como Deutsche Bank y Deutsche Telekom, también sufrieron los efectos del fallo. En Israel, los hospitales experimentaron problemas significativos. En el Reino Unido, la Bolsa de Valores de Londres, compañías ferroviarias y la cadena de televisión Sky reportaron interrupciones. El sistema de transporte público en Suecia y la cadena de farmacias noruega Apotek 1 también enfrentaron problemas técnicos.
Finalmente, a nivel corporativo, CrowdStrike perdió un 11% en el mercado tras el cierre de Wall Street debido a la actualización defectuosa de su plataforma de seguridad.
