El Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA emitió una alerta de tormenta geomagnética severa (G4) -tormenta solar-, la cuarta en su escala de intensidad. Lo anterior, tras observar al menos cinco eyecciones de masa coronal (CME – por su sigla en inglés) dirigidas hacia la Tierra.
Estos fenómenos espaciales, que se espera que lleguen cerca del mediodía de este viernes 10 de mayo, podrían persistir hasta el domingo 12 de mayo, marcando un fin de semana de alta actividad solar y potenciales desafíos para nuestra infraestructura tecnológica.
Según la entidad estadounidense, la fuente de estas CME es un cúmulo de manchas solares grandes y magnéticamente complejo, conocido como región 3664 de la NOAA. Esta área abarca unas impresionantes 16 veces el diámetro de la Tierra.
Impacto potencial en la Tierra
El impacto potencial de estas perturbaciones geomagnéticas en el campo magnético y la infraestructura tecnológica de la Tierra es significativo.
Las CME pueden causar irregularidades de tensión en el sistema eléctrico; problemas de orientación en satélites de órbita terrestre baja; intermitencias en la navegación por satélite (GPS); y comunicación intermitente por radio HF (alta frecuencia).
Además, la aurora boreal podría ser visible tan al sur como Iowa y Oregón, advierte la NOAA.
Evento raro en el ciclo solar actual
Desde el comienzo del ciclo solar actual en diciembre de 2019, solo se han observado tres tormentas geomagnéticas severas. La tormenta G4 más reciente ocurrió el 23 de marzo de 2024.
Mientras que el último evento G5, conocido como la tormenta de Halloween, tuvo lugar en octubre de 2003, causando cortes de energía y daños en transformadores a nivel mundial.
Recomendaciones de la NOAA ante la tormenta solar
Ante la llegada anticipada de las CME, la NOAA recomienda a los científicos, agencias gubernamentales y al público en general mantenerse informados y preparar planes de contingencia para mitigar los riesgos asociados con las tormentas geomagnéticas severas.